Me atrevo a decir que el contarles unos cuantos cuentos de
este tipo a nuestros alumnos, funcionará igual de bien ya sean de un ciclo o de otro,
por el simple hecho, de que cuando Irune puso el ejemplo de algunos de ellos en
nuestra clase de la Universidad, me empezó a entrar una risa floja que me hizo ponerme a comentar con algunas de mis compañeras la buena
idea que me parecía poner en práctica cosas como estas.
Si se los contásemos a los más pequeños de la Primaria, la
actividad se puede enfocar con el objetivo de ver cómo reaccionan, o ver las
respuestas que dan por tratarse de unos cuentos que pueden ser de carácter un
tanto burlón en el buen sentido de la palabra.

Sin nada más que decir, os dejo algunos de ellos que he sacado de esta página web y que a mí, me han gustado muchísimo: http://www.elhuevodechocolate.com/cuentos/cuentos8.htm
Esta es la
historia de un saltamontes
que salta y baila y
siempre se esconde.
¿Sabes tú dónde?
Esto era una vez
una serpiente
que se cayó y se
partió los dientes.
En lo alto de una montaña
hay una cabra comiendo,
levanta la cabeza y dice:
¡Qué gorda me estoy poniendo!
Un ratoncito iba por un descampado
y este cuentecito
se ha acabado.
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarEl de la cobra me encanta.. :D A los niños les parecen tan divertidos como a ti... te lo aseguro.
ResponderEliminarTe lo anoto.